El gochín: Crónica de un cumpleaños

domingo, 17 de febrero de 2008

Crónica de un cumpleaños

¡Ya hemos vuelto!
Ha sido un fin de semana de retiro espiritual, en busca de la paz interior, el relax total y la sagrada siesta.
El viernes por la tarde colocamos a Jaime con mi hermana y mi cuñado (el tío Damián), y cogimos la A7 hacia el norte. Y tan al norte, como que llegamos a la aduana de la Jonquera...
Sin salir de Cataluña nos metimos por carreteritas locales y llegamos al pueblo de Darnius, donde cogimos carreteruchas de cabras (bueno, exagero un poco, y además estaban bien señalizadas) hasta llegar al Hotel restaurant spa La Central, al lado del embalse de Boadella. Por lo visto se llama así porque el edificio era la antigua central eléctrica del antiguo pantano.
Veníamos con una oferta fin de semana a media pensión, con un pack que incluye un masaje y libre acceso a la piscina cubierta, la sauna seca y la sauna de vapor. Como era el regalo de cumpleaños de Mila decidí que podíamos darnos un homenaje y coger una habitación superior.
La habitación, perfecta. En una esquina del edificio, con un gran ventanal a los pies de la cama desde donde se puede ver las estrellas mientras duermes, y cómo va amaneciendo. Ademas, a tres pasos de la puerta del spa. Se echaba en falta únicamente un algo para colgar bañador y albornoz mojado para que se secase, encima de la bañera por ejemplo.
El sitio es bonito, en medio de la naturaleza y tal, con patitos y sin cobertura de móvil, bosque de alcornoques corcheros, alguna conífera, algún olivo y almendros todos en flor. Verás como venga una helada...
Nada mas llegar, en la cena, ya me di cuenta de que el lugar es impecable pero van cortos de personal, y el que hay no es cualificado. A mi no me importa que me abran mal una botella de vino, no me la den a probar ni me llenen las copas. De verdad. Añade calidad a un sitio pero puedo pasar sin ello. Lo que me molesta es que me sirvan las cosas a destiempo, tarde, con errores, frías, y pasando una eternidad entre plato y plato. Aun siendo poco personal, si hubieran sido camareros de verdad hubieran salido del paso sin problemas, no es un comedor tan grande. Yo he visto restaurantes con más mesas servidos perfectamente por una persona, y sin despeinarse.
La otra cuestión es que a pesar de todo lo dicho, si la comida fuera buena y hubiera acabado la cena diciendo "he cenado de puta madre" (con perdón), pues aquí no pasa nada. Pero no. Ni mucho menos. Nada elaborado, todo recalentado, se había empleado más esfuerzo en crear los nombres de los platos que en conseguir una cocina de mercado. Falta de personal, supongo.
Pero bueno, como aquí habíamos venido a disfrutar acabamos el postre, cogimos la copa de cava (que nos tenían que haber servido nada mas sentarnos pero se olvidaron) y nos fuimos para la habitación, donde caímos dormidos como ceporros porque la cena se había hecho eterna.
El sábado por la mañana tomamos un desayuno sin problemas porque fue "sírvete tu mismo", al estilo inglés. Mila trincó un panecillo con acompañamiento para la merienda ¿He dicho ya que le quiero? Después nos dedicamos a la piscina y la sauna, una gozada porque el dia acompañaba con mucho sol y calorcito. Ver fotos.
A la hora de comer nos acercamos a Darnius a picar algo en un bar, una esqueixada bastante buena con cervecita. También sin cobertura. Bonito pueblo, lugar natal del escritor Josep María Gironella, mira tu.
A las cuatro y media un masajito, corto pero muy agradable. A Mila le supo a poco y tuve que completarlo yo en la habitación. Después, más piscina y sauna. Acabamos arrugados como garbanzos en remojo.
De la cena, para que hablar. Peor que la anterior. En fin...
Pedimos una botella de Somontano que resultó bastante buena, y Mila le pegó unos buenos tragos en los ratos de espera entre platos, pillando un "pedete lúcido" según ella. Yo lo llamo de otra forma. De hecho se olvidó de llamar a su primo Paco para felicitarle el cumpleaños a las 12 menos cinco, una tradición que por lo visto han venido cumpliendo desde hace años. Ella llama a menos cinco, le felicita, a las 12 cuelgan, llama Paco y felicita a Mila. Ya ves que cosas...
El domingo nos despertamos hacia las 8 y algo, desayunamos y nos volvimos a la piscina dispuestos a exprimir al máximo el tiempo disponible, pues hay que salir de la habitación a las 12. Por desgracia el día estaba nubladote y no era tan agradable como el sábado, pero estábamos solos con las instalaciones para nuestro único disfrute.
Y nada. Una ducha (otra más), rehacer la maleta, rellenar el cuestionario de satisfacción del cliente (donde indiqué sin acritud pero firmemente lo anteriormente expuesto) y a entregar las llaves. Aquí me sorprendieron. Yo había comentado con Mila que creía que no tendrían un detalle de atención al cliente, para compensar el mal servicio y eso, pero lo justo es lo justo, no nos cobraron ni las llamadas de teléfono ni la botella de vino. Ademas nos dieron un vale de acceso gratuito a las instalaciones del spa por si volvemos otra vez.
Carretera y manta hacia Gerona, y el móvil de Mila a toda caña cuando conseguimos cobertura. En Gerona un paseito por el casco antiguo, subida hasta la catedral (rediós ¿que les costaba hacerla abajo?), y a comer en un pequeño restaurante en el que había estado Mila una vez. Le gustó mucho y me lo recuerda a menudo, así que quería conocerlo. Aquí sí, oye. Muy bien la comida y el servicio excelente. El sitio se llama Draps, y lo recomiendo. Pienso volver, total Gerona está a menos de una hora de Premià.
Y ya rapidito pa casa, que Mila estaba ansiosa por ver a su niño. Lo encontramos durmiendo la siesta pero se despertó rápido al oír a su mammmmma.
Podría poner alguna foto aquí de las muchas que hemos hecho pero no tengo ganas, hala, miradlas en el picasa.
La maleta aun está por deshacer. Mañana lunes. Agh. Vuelta a la realidad...

2 comentarios:

  1. Hola capullines; como os va todo, por lo que veo mas que bien, de lo cual me alegro mas que mucho.
    Espero que la proxima vez que vengais para leon nos aviseis.
    Un saludo para todos de Javi y Natalia.

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  2. Qué crónica, Juanma!! y que casita más mona!!!y el ventanal!! suerte que acabasteis el finde en el restaurante de Girona! para completar y eso!! ;)

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Graciaaas...
P.D. ¿Que parte de NO ME GUSTAN LOS ANÓNIMOS no habéis entendido,so tarugos?